Hoy en día en el mercado existen muchos tampones de diferentes tipos. Sin embargo, casi todos están hechos de algodón, rayón o una combinación de ambos materiales.
A continuación mencionamos los cuatro tipos principales de tampones.
- Con aplicador de cartón: este es el más simple y más barato.
- Con aplicador de plástico: los tampones con aplicadores de plástico tienden a ser un poco más caros, pero la mayoría de las mujeres opinan que este diseño brinda mayor facilidad para introducir el tampón en la vagina y que se siente más cómodo.
- Con aplicador extensible: se trata de un tampón con un estilo más innovador, compacto y discreto, que viene en un paquete mucho más pequeño que los tampones y aplicadores típicos. Para usar el aplicador, se debe extender el tubo más pequeño tirando de él.
- Tampones digitales: estos tampones no poseen un aplicador. Para insertarlos es necesario presionarlos hacia el interior de la vagina con los dedos.
Los tampones también varían según su capacidad de absorción y atendiendo a esa clasificación se nombran por ejemplo, «Absorción Junior», «Regular», «Super», «Super-Plus» y «Ultra».
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